40 Partieron con todo su ejército, llegaron y acamparon cerca de
Emaús, en la Tierra Baja.
41 Los mercaderes de la región, que oyeron hablar de ellos, tomaron
grandes sumas de plata y oro, además de grilletes, y se
fueron al
campamento con intención de adquirir como esclavos a los hijos de Israel.
Se les unió también una fuerza de Idumea y del país de los filisteos.
42 Judas y sus hermanos comprendieron que la situación era grave: el
ejército estaba acampado dentro de su territorio y conocían la consigna del
rey de destruir el pueblo y acabar con él.
43 Y se dijeron unos a otros: «Levantemos a nuestro pueblo de la
ruina y luchemos por nuestro pueblo y por el Lugar Santo.»